La villa está rodeada de vegetación, encima de la hermosa bahía de San Gregorio, que nace del deseo de su propietario de compartir su casa con sus huéspedes.
La casa cuenta con tres habitaciones dobles, equipadas con baño privado, nevera, mosquiteros, aire acondicionado, wifi y televisión.
Además, los huéspedes tienen a su disposición una amplia terraza, ducha exterior con agua caliente, lavadora y aparcamiento.