Nuestra aventura en la hospitalidad comienza en 2012, cuando decidimos por primera vez abrir las puertas de nuestra casa al resto del mundo. Con nuestra experiencia como viajeros y huéspedes de muchos anfitriones inolvidables, queríamos dejar una huella y formar parte integral de la experiencia de viaje. Nuestro objetivo es hacer que su estancia en nuestra hermosa ciudad, un lugar único y diferente a todos los demás, pero a veces difícil de entender, sea más auténtica, más viva y más humana. La experiencia de hospedar resultó ser sorprendente; dimos mucho y recibimos aún más. Hicimos amistades duraderas y el mundo entró en nuestra casa, trayendo consigo su diversidad, sus características únicas y sus maravillas. Creemos que un pedacito de nosotros y de nuestra casa quedó impreso en la memoria de quienes cruzaron el umbral. Nuestra casa está ubicada en una zona alejada de las rutas turísticas habituales, con vistas al encantador Río de las Terese, que nos ha cautivado y del cual hemos tomado su nombre. Esperamos que ustedes también queden fascinados por este lugar encantador. Diseñamos nuestra casa con el objetivo de crear un ambiente acogedor tanto para nosotros como para nuestros huéspedes, respetando mutuamente la privacidad. Serán completamente independientes y libres de moverse como prefieran, pero si lo desean, siempre estaremos felices de compartir nuestro conocimiento de la ciudad para ayudarles a vivir como verdaderos venecianos, incluso si es solo por un breve período de tiempo.