En dos minutos a pie se llega a la Piazza del Duomo, dominada por el majestuoso Duomo de San Giorgio, desde donde se recorre el curso principal de Ibla, repleto de palacios nobles e iglesias barrocas, que han valido a Ibla la inscripción en la Lista del Patrimonio Mundial. Entre las calles y callejones de Ibla no faltan bares, restaurantes y heladerías, que harán aún más placentera su estancia. A veinte minutos en coche se encuentra el destino turístico de playa más famoso del sudeste de Sicilia, Marina di Ragusa, con sus playas de fina arena dorada, clima mediterráneo durante ocho meses al año, y que este año por séptimo año consecutivo ha obtenido la bandera azul.